Os voy a contar un secreto: mi abuela nunca ha ido a la universidad pero si de algo sabe esa mujer es de la vida. Os prometo que con sus 82 años ha visto casi cualquier cosa que se te pueda pasar por la cabeza, sin exagerar. Y por este motivo, siempre que puede (y le dejo) se anima a darme unos cuantos consejos para que mi vida siempre vaya por el buen camino. Muchas veces me ha dicho que tengo que llevar una dieta equilibrada, hacer deporte, no salir de fiesta… pero si hay un consejo que recuerdo siempre es el que me dijo una vez sentada en su sillón mientras veía la televisión: lo barato, siempre sale caro.

Al principio, yo no entendía este consejo, pero con el tiempo he ido viendo que siempre que compraba algo barato terminaba pagando un montón de dinero arreglándolo. Y por eso estamos aquí, para daros este mismo consejo a todos vosotros: “lo barato sale caro…y más en temas de la vista”.            No es lo mismo comprar un televisor muy barato y que tengas que comprarte otro a los dos meses porque el que compraste no funciona, que comprar unas gafas baratas de mala calidad y que te dañe la vista. Ya que lo del televisor tiene fácil solución pero si te destrozas la vista con unas gafas de mala calidad sí que ya no tienes vuelta atrás. Y es ahí donde está el mayor problema hoy en día.

Hay muchas personas que por ahorrarse unos cuantos euros, terminan comprándose gafas de vista en la farmacia de su barrio. Y esto sí que es un problemón de los gordos. Este tipo de gafas baratas suele provocar a la larga problemas como la persbicia o la vista cansada y, además, agravan estos problemas. Veamos, seguro que les suena esta situación: una persona de 40 años nota como que le cuesta enfocar cuando lee el periódico o mira el móvil y decide ir a comprarse unas gafas al chino o a la farmacia para ahorrarse unos cuantos euros de nada. Y este es el mayor error que puede cometer, ya que con la salud visual no se debe jugar.

Pero… ¿por qué no debemos comprar gafas en bazares chinos o farmacias?

Pues bien, en primer lugar, si no sabes la graduación EXACTA no compres gafas en ningún lado. Antes de nada, debes acudir al oftalmólogo a que te haga una revisión y que detecte si tienes algún problema de vista más grave. Pero aunque sepas tu graduación, tampoco debes comprarte gafas baratas en estos sitios porque las lentes convergentes (tipo lupa) con mayor graduación tienen una calidad óptica muy deficiente comparadas con un par de gafas buenas, ya que el proceso de fabricación es más barato. Además, si tienes astigmatismo ni se te ocurra tocar estas gafas porque puedes hacer que tu problema sea más grave.

Otro problema muy grande de este par de gafas baratas es que no tienen tratamiento antirreflejante (algo imprescindible hoy en día) porque mejora la calidad óptica de las gafas y evita todos los reflejos producidos por las luces artificiales. Así que si quieres unas gafas con el tratamiento antirreflejante tendrás que hacerlas a tu medida, pero vamos… te aseguramos que sales ganando.

Pero… ¡ojo! Con este artículo no queremos decir que te creas todo lo que te dicen en la óptica porque muchas veces también hacen trucos con tus gafas para ganar más dinero. Increíble, ¿verdad? Pues según un estudio de vista en una óptica, te gradúan las gafas ligeramente a más (0,15 – 0,25 dioptrías) para viciar los ojos y que vuelvas más rápido a comprar otro par de gafas nuevo. Pero si les pides que te hagan las gafas con 0,25 dioptrías menos, la propia óptica te recomienda no hacer porque hay que dejar espacio de maniobra a los ojos para que no se pongan vagos. Así que ten cuidado y no te creas todo lo que te dicen en la óptica.

¿Con las gafas de sol también ocurre?

En efecto, con las gafas de sol el problema no solo ocurre, si no que se agrava. Todos nos hemos comprado alguna vez gafas de sol del chino o de un top manta y algunas de ellas venían con el logo de la CE pero es falso. Si con las gafas de vista teníamos un problema cuando las comprábamos en una farmacia, imagina estas gafas de sol compradas en un chino o un top manta. El principal problema de estas gafas es que los cristales no paran la radiación ultravioleta del sol, por lo que nos afecta directamente a los ojos. “Pues como ir sin gafas” estaréis pensando, pues no. Cuando vas sin gafas de sol, tus pupilas están pequeñas porque hay mucha luz por lo que cuando le da el sol el daño es mínimo. Mientras que cuando llevas estas gafas de sol, la pupila está dilatada porque se encuentra en un ambiente oscuro, y los rayos ultravioleta están pegando de pleno. Este hecho nos puede provocar quemaduras en la córnea, pinguécula, cataratas y degeneración macular asociada a la edad.

Aunque el problema descrito anteriormente es el más grave, por usar gafas de sol también podemos perder visibilidad, ya que estas gafas de sol de mala calidad suelen contener burbujitas y rugosidades en las lentes. Cuando esto ocurre, nos resta visibilidad y podemos tener un accidente con el coche.

En definitiva, hazle caso a mi abuela e invierte un poco en tus lentes de contacto porque al final todo lo barato termina saliendo caro. Y en este caso mucho más, ya que te estás jugando tener problemas graves de vista dentro de unos años. Así que ya sabes, cuando se trata de tu vista no racanees nada y gástate el dinero que haga falta para no pagarlo después con el paso de los años.